Colaboración y fortalecimiento mutuo son los aspectos que Marcela Torres, Regional Leader, American Express Meetings & Events Latin America Region, le han dado vueltas en la cabeza desde hace algunos años al tocar el tema de las mujeres y el ámbito laboral, en la que ella pone un énfasis especial en el cómo enfocarnos como género y fortalecernos unas a otras no solo en la industria de reuniones sino en todas las industrias.
¿Qué tanto ha influenciado la mujer en el desarrollo de la Industria de Reuniones?
Hemos ido influenciando a esta y otras industrias al demostrar que las habilidades y los resultados no son un tema de género, sino de actitud y determinación para alcanzar un objetivo común. La mujer ha sido soporte de la industria durante muchos años, desfortunadamente las posiciones de liderazgo de alto nivel siguen estando ocupadas por hombres.
¿Qué espacios consideras, ha logrado la mujer para su desarrollo y profesionalización en la Industria de Reuniones?
Hemos avanzado y demostrado capacidad de ocupar espacios que parecían confinados a un género. Hoy en día tenemos un mejor posicionamiento en puestos administrativos y estratégicos, sin embargo, no hemos logrado representatividad en puestos directivos. Por ejemplo, durante el 64 aniversario del reconocimiento del voto de las mujeres en México, nuestro país ocupa la posición 122 entre 144 países evaluados por las oportunidades económicas y laborales que hay para las mujeres. Solo el 5.2 % de los asientos del Consejo de Administración de las empresas son ocupados por mujeres.
Hoy en día, las organizaciones han empezado a manejar el tema de la equidad a través de “cuotas”, es decir, permitir que la mujer tenga representatividad en porcentaje a través de la implementación de ciertas políticas, sin embargo, el reto es transformar esto y lograr que la representatividad de la mujer sea por talento. En este proceso creo que un factor que abonará para lograr equidad laboral, dependerá del apoyo que encontremos en nuestros equipos de trabajo, mayoritariamente formados por mujeres. En mi experiencia una mujer avanza más lento que un hombre, cuando no encuentra el apoyo de su propio género.
¿Hay machismo actualmente en la industria? ¿Qué características tiene dentro del sector y hacia las mujeres y a qué te has enfrentado en este aspecto?
Sigue habiendo machismo, incluso desafortunadamente, fomentado a veces por las propias mujeres. Creo que debemos enfocarnos como género a construir y fortalecer el sentido de hermandad en el trabajo y fuera de él. Conforme el tiempo pasa, creo que la idea de que una mujer exitosa debe desmarcarse del propio género para lograr competitividad en un mundo de hombres, ha ido cambiando.
Entre más grupos de mujeres logremos reunirnos para “coachearnos” y apoyarnos, los obstáculos en el mundo laboral irán disminuyendo. En mi experiencia, agradezco el apoyo de los colegas que, con una filosofía más abierta para refrescar contenidos y tendencias, me extienden la oportunidad para participar en conjunto en algunos foros.
Hoy, se ven y se conoce un mayor número de mujeres líderes dentro de la industria ¿Qué figuras femeninas dentro de la industria ya sea en América Latina o en otras regiones del mundo, te han marcado o son las que más admiras actualmente?
¡Muchas, la lista sería larga! Dentro de la industria puedo mencionar a profesionales a las que admiro y a quienes he tenido la oportunidad de conocer de cerca como Virgina Arana, Ana Paula Hernández, Araceli Ramos, Ivonne Toquero, Lourdes Berho, Patricia Farías Barlow, Carol McGury, Patrizia Buongiorno, Emma Channon, Tamara Kavalec, Roslyn McLeod, etc. Agradezco a todas las mujeres que me he encontrado en el camino, de todas aprendo y me inspiro para generar un cambio. Incluso invitaría a que como práctica hagamos del reconocimiento un hábito que nos permita a través de ello valorar nuestro propio trabajo.
¿Cuáles consideras son los retos actualmente de la mujer en la Industria de Reuniones?
Alcanzar y seguir abriendo espacios en posiciones de toma de decisiones, generar equidad de género en la brecha salarial (en 2018 Belen Sanz, representante de ONU Mujeres en México, sostuvo que las mujeres dedicamos el triple de tiempo en labores del hogar y enfrentamos una brecha salarial del 30 %), buscar círculos de trabajo para construir, compartir nuestros retos y apoyarnos. Las mujeres enfrentamos desafíos similares en el mundo laboral que trascienden la edad, la posición y la industria en la que estamos, por lo que es fundamental cambiar la perspectiva que tenemos de nosotras mismas y no autolimitarnos. Es un hecho que los espacios se están abriendo, por lo que el enfoque en nuestras capacidades y el valor que aportamos, es fundamental para sortear las barreras que se presenten.
¿Faltan más mujeres en la presidencia de las grandes asociaciones o falta abrir un poco más los criterios de estas, hacia las mujeres?
Es fácil darse cuenta desde que entras a la industria que la participación de las mujeres es importante en porcentaje, y con esa claridad también es fácil darse cuenta que en las posiciones claves tanto en asociaciones de la industria de reuniones como en la iniciativa privada, tenemos una mínima presencia.
Pareciera como si la ausencia de mujeres en la presidencia de grandes asociaciones se debe a su falta de involucramiento. Creo que habría que distinguir entre las causas por las que las mujeres están fuera de los puestos directivos y lo que se pueden hacer para contrarrestarlo (mayor involucramiento y nuevos espacios/foros). Hagamos que nuestra presencia sea generadora de cambios positivos y abramos camino para otras mujeres.
¿Hacia dónde debe enfocarse el papel de la mujer hoy, en la Industria de Reuniones con miras en los próximos 5 años?
Fortalecer nuestro liderazgo y autoconfianza, apoyarnos en nuestras redes de contactos y hacer empatía con otras mujeres. Desvanecer el rol de la mujer en casa ¡ya no hay roles! es importante impulsar el equilibrio y la toma de responsabilidades compartidas. Dejar de emitir juicios e involucrarnos en guerras de poder, para enfocar nuestras energías en hacer mancuerna, en hacer equipo. Muchas veces visualizamos en el triunfo de otras nuestro fracaso, por eso reitero que la empatía jugará un rol relevante.