En la gestión de eventos, la confianza del liderazgo no se basa solo en la creatividad o en la asistencia, sino en métricas tangibles como la rentabilidad. La recuperación del margen bruto se ha convertido en una prioridad para los estrategas de eventos, quienes deben conectar los puntos entre asistencia, ingresos y gastos en un panorama que aún enfrenta desafíos post pandemia. Así lo plantea Dave Lutz, CMP, en su artículo para PCMA, donde analiza cómo la caída en la rentabilidad de los eventos impacta en la toma de decisiones estratégicas y en la credibilidad de los organizadores ante la alta dirección.
Un antes y un después en la rentabilidad de eventos
Antes de la pandemia, los eventos de alto rendimiento registraban márgenes brutos del 55 al 65 por ciento. Sin embargo, en 2024, esa cifra ha caído hasta 20 puntos, afectando la financiación de asociaciones y servicios para miembros. ¿La razón principal? Un incremento del 30 por ciento en los costos, lo que ha puesto a los organizadores de eventos bajo mayor escrutinio y presión.
A pesar de que muchos eventos han logrado recuperar sus ingresos, los márgenes siguen siendo bajos. Esto se traduce en decisiones difíciles: reducir costos, ajustar estrategias o incluso redefinir la manera en que los eventos generan valor para sus participantes y patrocinadores.
¿Estamos realmente en plena recuperación?
Las cifras cuentan una historia diferente a la percepción general. Aunque la industria hotelera ha mostrado signos de recuperación, solo el 29 por ciento de los organizadores encuestados por PCMA indicaron que la asistencia a sus eventos más grandes ha vuelto a niveles pre pandemia. Mientras que el 49 por ciento reportó un crecimiento. Sin embargo, los datos del CEIR (Centro para la Investigación de la Industria de Eventos) revelan que solo el 34 por ciento de los eventos han superado sus niveles de desempeño de 2019.
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Desafíos y amenazas externas
El camino hacia la recuperación total no está exento de obstáculos. Entre los factores externos que preocupan a los profesionales del sector se encuentran la disminución de fondos para investigación y subvenciones, el impacto de tarifas arancelarias y los problemas de fuerza laboral. Estos elementos, aunque fuera del control directo de los organizadores, requieren estrategias de mitigación para evitar un impacto negativo en la rentabilidad de los eventos.
El liderazgo como pilar de la rentabilidad
Más allá de la planificación y la logística, el liderazgo es el eje que sostiene la rentabilidad de un evento. Los líderes de eventos no solo deben gestionar presupuestos y proveedores, sino que también deben inspirar confianza en sus equipos y en la alta dirección. Un líder estratégico es capaz de tomar decisiones informadas que equilibran costos, generan valor para los asistentes y aseguran la sostenibilidad del evento en un mercado cada vez más competitivo.
En un contexto donde los márgenes de ganancia han disminuido y los costos han aumentado, el liderazgo no es opcional, es una necesidad. Los organizadores de eventos deben demostrar su capacidad para adaptarse, prever riesgos y optimizar cada recurso disponible. Aquellos que dominan estos aspectos no solo aseguran el éxito de un evento, sino que también consolidan su papel como piezas clave dentro de sus organizaciones.
Mirando hacia el futuro
Las previsiones han cambiado. En 2023, se estimaba que la industria de eventos se recuperaría completamente en 2024, pero el pronóstico se ha ajustado a 2026. Esto significa un crecimiento moderado de entre 1 y 5 por ciento anual durante los próximos años. Sin embargo, los eventos rara vez superan el crecimiento de las industrias a las que sirven, lo que obliga a los organizadores a repensar sus estrategias.
Más allá de los desafíos, los estrategas de eventos tienen en sus manos la oportunidad de fortalecer su credibilidad ante la alta dirección. Comprender, rastrear y optimizar el margen bruto no solo es clave para la viabilidad de los eventos, sino que también se traduce en decisiones estratégicas más informadas y en una recuperación sostenida para toda la industria.