Esta semana IHG® Hotels & Resorts lanzó Clean Promise (Promesa de Limpieza) en sus propiedades a nivel mundial, un programa que redefine los protocolos de limpieza en instalaciones y en seguridad y bienestar personal para el huésped que contrate los servicios de la firma hotelera; el nuevo plan se adhiere a las nuevas normas sanitarias y a las perspectivas de viaje tras el paso de la pandemia de COVID-19.
El nuevo plan se realiza en asociación con Cleveland Clinic, Diversey y Ecolab, empresas líderes en tecnología para la implementación de medidas preventivas en higiene y servicios, con el objetivo de respaldar en la ciencia dichas mejoras en los hoteles y en la próxima experiencia para los clientes.


A este respecto el Director Ejecutivo de IHG, Keith Barr, explicó: «El futuro de los viajes puede parecer diferente, pero una estadía segura es fundamental para brindar una verdadera hospitalidad, y eso nunca cambiará. Al combinar el conocimiento y los procesos de clase mundial de IHG, con la experiencia de vanguardia de Cleveland Clinic, Ecolab y Diversey, podemos asegurarles a los huéspedes y colegas que estamos enfocados en proteger su salud y bienestar.
Esto incluye analizar dónde la tecnología puede marcar la diferencia, implementando una limpieza mejorada, altamente visible y más frecuente, además de nuevas medidas y diferentes enfoques en el manejo de alimentos y bebidas, todo apuntalado por nuestra nueva IHG Clean Promise».
Este programa se implementa sobre la base de uno existente, IHG Way of Clean, el cual fue desarrollado en 2015 y también con la participación de Ecolab y Diversey; el programa de 2015 de igual manera se centró en los estrictos procesos de limpieza e higiene. Ahora con Clean Promise se atienden las recomendaciones sanitarias y mejores prácticas impuestas a raíz del brote de Coronavirus, recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y de autoridades de salud locales.
El nuevo régimen de higiene Clean Promise de IHG establece que, si un huésped no está satisfecho con el estándar de limpieza en su habitación, la propiedad rectificará de inmediato la situación. La nueva política entrará en vigencia a partir del 1° de junio de 2020.